To: me@example.com From: you@example.com Subject: Test message with Spanish text, no encoding, is windows-1250 (as detected) Date: Tue, 20 Apr 2021 15:20:34 -0500 MIME-Version: 1.0 Content-Type: text/plain; Content-Transfer-Encoding: 8bit Content-Language: en-US A lo largo de mi vida he sido testigo de muchas historias, experiencias e interpretaciones de la vida. Y me doy cuenta de que lo que más aprecio es la honestidad. En estos últimos meses siento que se ha polarizado aún más esta gran diferencias: las personas que son honestas consigo mismas, incluso en su deshonestidad, y las que no. Las personas honestas son aquellas dueñas y responsables de su vida. Que no buscan una autoridad externa que les guíe, que les proteja, que les cuide. Las personas deshonestas son aquellas que se creen víctimas de la vida, que culpan al otro o a los otros de sus “desgracias”. Que buscan fuera lo que solo pueden encontrar dentro. A lo largo de mi vida he sido testigo de muchas historias, experiencias e interpretaciones de la vida. Y me doy cuenta de que lo que más aprecio es la honestidad. En estos últimos meses siento que se ha polarizado aún más esta gran diferencias: las personas que son honestas consigo mismas, incluso en su deshonestidad, y las que no. Las personas honestas son aquellas dueñas y responsables de su vida. Que no buscan una autoridad externa que les guíe, que les proteja, que les cuide. Las personas deshonestas son aquellas que se creen víctimas de la vida, que culpan al otro o a los otros de sus “desgracias”. Que buscan fuera lo que solo pueden encontrar dentro.